Jiyoung Park (nacida en 1985) trabaja entre el arte fino y la ilustración. Sus estudios en diseño en la Universidad Daedeok (Daejeon, República de Corea) informan su polinización cruzada de prácticas, ayudando a su destreza y práctica en portadas de libros, incluyendo numerosos bestsellers, pósters de películas, portadas de álbumes y obras de arte más tradicionales. Los músicos independientes y artistas de música new-age han mostrado un interés particular en sus difusos colores pastel y su estilo distintivo pero atemporal, encargándole trabajos que se pueden encontrar en exhibiciones de tiendas de discos y servicios de transmisión en línea para músicos como Yun DDanDDan, Damsone Gongbang (literalmente, Pequeño Taller de Damso), Jongmin Lee (Daniel), Eunsong Ji, Saeju y Kyoungtae Kim. Desde 2015, sus obras se han centrado exclusivamente en la pintura de arte fino en medios digitales.
Los paisajes constituyen la mayor parte de las obras de Jiyoung Park. La expansión tranquila de las colinas ondulantes de la naturaleza, la vegetación, las líneas de árboles, a veces con carreteras y otras estructuras, son vistas que la artista disfruta personalmente; muchas han sido encuentros de sus largas caminatas y destinos de viaje. La mayoría de sus pinturas están conectadas a paisajes y vistas del mundo real que han impulsado su pincel, pero la imaginación se difumina en cierto umbral con una elusiva extrañeza, como una visión utópica.
Su lienzo digital captura la noción del tiempo y las estaciones que pasan a través de la expresión de la luz y las sombras transitorias, inmediatamente familiares como los colores suaves de la naturaleza. En sus obras, hay personas, a veces solo un individuo, como sujetos minúsculos dentro del paisaje, identificables como familia, amantes, amigos o incluso ella misma.
Las figuras contemplativas y sin expresión parecen protegidas y reconfortadas en el cálido y vasto abrazo de la naturaleza. Existe una tranquilidad silenciosa allí, ya sea una persona paseando a su perro por una calle soleada, una persona sentada en un banco o una persona apoyada contra un árbol. Los paneles están llenos de pausas que la vida moderna intenta abreviar. Alentamos a los visitantes a tomar esa pausa por solo un momento y permitir que la mirada deambule lentamente dentro del cuadro. Encuentren el silencio que el bullicioso ritmo de la vida ha olvidado. Estén en su centro.